Actualmente, el sector del automóvil en España va en caída libre, llevamos ya bastantes meses consecutivos de descensos en las ventas y las asociaciones y profesionales del sector llevan ya tiempo poniendo el grito en el cielo exigiendo un salvavidas al gobierno a fin de poder mitigar un poco el impacto de la crisis sobre las ventas.
El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha anunciado que están estudiando la viabilidad de la implantación de un plan renove de cara al año 2013. Hasta hace no mucho, el anterior gobierno sacó el Plan VIVE con el objetivo de reanimar las ventas, y ciertamente tuvo un éxito considerable. Antes del VIVE, años atrás, existía el mítico Plan Prever y Plan Renove, que también estimularon positivamente las ventas, siempre con el mismo objetivo: retirar de la circulación un coche viejo para introducir uno nuevo, que contamine menos.
Sin embargo, la actuación del ministro no es del todo correcta. Principalmente por un motivo: anunciar la posibilidad (puesto que no está confirmado con total seguridad de que vaya a dar a luz finalmente) de dicho plan, con una antelación de al menos 3 meses. ¿Por qué? muy sencillo. Si tenemos en cuenta que un anuncio como la subida del IVA, en los dos meses anteriores (Julio-Agosto) no ha supuesto un freno en el descenso en las ventas de coches por parte de aquellos compradores que tuvieran pensada la adquisición de un coche y quisieran ahorrar un dinero considerable comprándolo antes de la subida, estas declaraciones suponen otro muro más a derribar en lo referente a atajar el descenso de las ventas de coches, puesto que mucha gente optará en lugar de comprarse el coche esperar hasta 2013 a la puesta en marcha de las ayudas, si es que las hay, haciendo aún más agonizante el constante descenso de las ventas.
En España existe mucha industria automovilística pese a algunas deslocalizaciones realizadas durante los últimos años. Pese a todo, en nuestro país, el 85% de vehículos que se fabrican, son exportados, por lo que en cierta manera eso ha sido lo que ha aguantado un poco los 270.000 empleos directos e indirectos que actualmente da el sector del automóvil en este país.
Suponemos, que, en caso de aprobarse el plan de ayuda, los requisitos serán similares a los de planes anteriores: entregar un coche usado con algunos años y comprar uno nuevo cuyas emisiones no superen a las establecidas por el gobierno.
