Aston Martin ha vuelto a despertar una de sus leyendas con la llegada del nuevo Vantage S, una versión que eleva el ya impresionante coche deportivo a la categoría de supercoche con motor delantero. Presentado en el marco del Goodwood Festival of Speed, este modelo no es solo una actualización, sino la máxima expresión de rendimiento dentro de la aclamada gama Vantage. Siguiendo la estirpe de los icónicos modelos ‘S’ que se remonta al DB3S de 1953, esta iteración ha sido diseñada para ofrecer una experiencia de conducción más visceral y dominante.
Bajo su carrocería late un corazón V8 biturbo de 4.0 litros, ensamblado a mano y recalibrado para desatar una potencia de 680 CV y un par motor de 800 Nm. Este notable empuje del motor permite al Vantage S acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3,4 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 325 km/h. La potencia se transmite a las ruedas traseras a través de una caja de cambios automática ZF de ocho velocidades, mientras que la perfecta distribución de peso 50:50 asegura un equilibrio dinámico excepcional.
Pero el Vantage S es mucho más que cifras. La conexión entre el conductor y el asfalto se ha intensificado gracias a una serie de mejoras en el chasis. La más significativa es el montaje directo del subchasis trasero a la carrocería, eliminando los silentblocks de goma para lograr una respuesta de la dirección y una agilidad mucho más directas. A esto se suman ajustes en los amortiguadores adaptativos Bilstein DTX y una nueva calibración del pedal del acelerador, que afinan la respuesta del coche para ofrecer una precisión milimétrica en cada curva.
El diseño exterior combina agresividad y elegancia funcional. Las nuevas lamas montadas en el centro del capó no solo imponen visualmente, sino que optimizan la refrigeración del motor, mientras que el alerón trasero de anchura completa añade 44 kg de carga aerodinámica a alta velocidad. El interior refleja esta misma filosofía, con un habitáculo que mezcla Alcantara y cuero, detalles en fibra de carbono y el distintivo bordado ‘S’. Las primeras entregas están previstas para el último trimestre de 2025.