El Bestune Joyee 07 aterriza en España como un SUV híbrido enchufable de 4,75 metros que busca conquistar el segmento medio con un sistema de propulsión capaz y una autonomía eléctrica superior a la de muchos rivales. Su etiqueta CERO de la DGT y su precio contenido lo sitúan como alternativa directa frente a modelos como el Ford Kuga PHEV, el MG HS PHEV o el DFSK E5, aunque arranca con algunas carencias en dotación de seguridad que su importador ya planea corregir.
Por fuera es prácticamente un Bestune T90, del que se diferencia principalmente por el parachoques delantero. Mientras el T90 monta un motor de gasolina sin hibridación de 185 CV, el Joyee 07 combina un bloque de 1,5 litros turboalimentado de 150 CV con eficiencia térmica del 45,2 por ciento, muy elevada, y un motor eléctrico de 228 CV para sumar 250 CV totales. Hace uso de la plataforma FMA del Grupo FAW, de carácter modular, permite esta flexibilidad.
La batería es de tipo LFP con 21,2 kWh de capacidad bruta, suficiente para recorrer hasta 110 kilómetros en modo eléctrico según el ciclo WLTP. Esa cifra supera a la mayoría de sus competidores, como el Ford Kuga PHEV o el MG HS PHEV, aunque queda por debajo del Leapmotor C10 REEV con sus 145 kilómetros o del BYD Seal U en versión de batería grande, que alcanza 125 kilómetros. En otros mercados existe una variante con batería de 30,9 kWh capaz de llegar a 210 kilómetros eléctricos, 10 más que el Lynk&Co 08 pese a que este último lleva una celda de casi 40 kWh. Sin embargo, Bestune no tiene previsto comercializar esa versión en España de momento. El Joyee 07 acelera de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos y alcanza una velocidad máxima limitada a 180 km/h.
En el interior encontramos dos pantallas: una de 8 pulgadas para la instrumentación y otra de 12,6 pulgadas colocada en vertical que centraliza la mayoría de funciones, dejando escasos mandos físicos más allá de los controles del volante y las palancas tras él. El maletero ofrece 590 litros de capacidad.
El único nivel de equipamiento incluye portón eléctrico, acceso y arranque sin llave, cámaras con vistas 360 grados, iluminación ambiental, techo panorámico, sensores de aparcamiento delanteros y traseros, y asientos delanteros en piel sintética con ajustes eléctricos, memorias y calefacción. También monta asientos traseros calefactables y climatizador automático. En asistentes a la conducción aparecen programador de velocidad activo, aparcamiento semiautomático, frenada de emergencia en ciudad, mantenimiento de carril, alerta de tráfico cruzado marcha atrás y detector de fatiga, pero inicialmente carece de detector de ángulo muerto o lector de señales.
El precio de 37.990 euros lo sitúa por debajo de la media del segmento, aunque sin mejorarlo frente a alternativas como el Leapmotor C10 REEV, el DFSK E5 o el propio MG HS PHEV. Con las ayudas del Plan MOVES III por achatarramiento, el coste desciende hasta 29.780 euros. La distribución corre a cargo de Kngloo, que cuenta con nueve concesionarios en España y un centro logístico en Tarragona.