La marca Santana vuelve al mercado español (si bien nada se parece con la original, dado que es una empresa de capital estatal chino quien ha registrado los derechos de la marca) con el 400, un pick-up que marca el regreso de un nombre legendario del todoterreno nacional. La histórica fábrica de Linares, en Jaén, recupera su actividad tras tres lustros de silencio para ensamblar este modelo que llegará con dos mecánicas muy distintas: diésel de 190 CV y una híbrida enchufable de 429 CV. El proyecto arranca con una inversión de 5 millones de euros y la creación de unos 200 empleos directos, con una línea capaz de producir hasta 5.000 unidades al año.
Basado en el Dongfeng Z9 chino y hermano del Nissan Frontier Pro, está desarrollado sobre la plataforma F-Alpha de Nissan, que es ni más ni menos la que usaba el Navara D40 de 2005, siendo por tanto una plataforma muy veterana.
El Santana 400 D monta un motor diésel de 2,3 litros que entrega 190 CV y un par de 450 Nm con cambio manual o 500 Nm con automático ZF de ocho velocidades. Su depósito de 73 litros le otorga una autonomía de 848 kilómetros, mientras que su carga útil alcanza los 815 kg y puede remolcar hasta 3.200 kg. La versión PHEV combina un bloque de gasolina de 1,5 litros con dos motores eléctricos que suman 429 CV y 800 Nm de par, acelerando de 0 a 100 km/h en apenas 6,5 segundos. Su batería de 32 kWh promete 120 kilómetros de autonomía eléctrica y carga rápida del 30 al 80% en 20 minutos, con funciones V2L de 6 kW para alimentar herramientas externas.
Más allá de la potencia del motor, el Santana 400 cuenta con tracción total conectable, reductora electrónica Borgwarner, bloqueo del diferencial trasero Eaton opcional y hasta ocho modos de conducción. La altura libre al suelo de 24 centímetros se combina con ángulos de ataque de 31 grados, salida de 26 grados y capacidad de vadeo de 80 centímetros. El chasis de largueros y carrocería de acero de alta resistencia sostienen sus 5,52 metros de longitud, distancia entre ejes de 3,30 metros y caja de carga de 1.165 litros.
El Santana 400 D arranca en 29.900 euros sin IVA con cambio manual, mientras que la versión DS con automático y acabado mejorado alcanza los 34.600 euros. La PHEV parte de 44.700 euros y la PHEV S en 49.100 euros, posicionándose como uno de los todoterreno con tracción total más accesibles del momento. El pick-up se comercializará inicialmente en España, Portugal, Italia, Andorra y Gibraltar, con planes de expansión a otros mercados europeos y Sudamérica.
