El hiperdeportivo eléctrico de la marca de lujo de BYD ha firmado 496,22 km/h en el circuito de pruebas ATP Automotive Testing Papenburg, en Alemania, y se convierte en el coche de producción más rápido del planeta. El registro supera los 490,48 km/h del anterior récord absoluto y refuerza que las prestaciones extremas ya no son terreno exclusivo de la combustión. No es, eso sí, el U9 “de serie” tal cual: el U9 Xtreme es una evolución específica y limitada.
El récord se consiguió el 14 de septiembre de 2025 con el piloto alemán Marc Basseng al volante. Con esta marca, BYD no solo pulveriza el listón entre los eléctricos, también rebasa el mejor dato logrado por un coche de combustión. El U9X salta así al primer plano del automovilismo mundial como escaparate tecnológico y símbolo de una nueva etapa para los hiperdeportivos.
La clave está en un sistema de propulsión y arquitectura eléctrica. El U9 Xtreme opera a 1.200 V, superando los 800 V habituales en deportivos de última generación, y se apoya en una Blade Battery LFP con tasa de descarga de 30C, pensada para entregar energía de forma ultrarrápida. Monta cuatro motores eléctricos capaces de girar hasta 30.000 rpm y de aportar en conjunto más de 3.000 CV, coordinados con una suspensión DiSus-X ajustada para circuito y neumáticos semislick. No es una simple evolución del Yangwang U9 ya vendido en China, sino una especificación creada para este reto.
El piloto Marc Basseng destacó la ventaja operativa del sistema de propulsión eléctrico: “Técnicamente, algo así no es posible con un motor de combustión. Gracias al motor eléctrico, el coche es silencioso y sin variaciones de carga, lo que me permite concentrarme totalmente en el trazado”. Desde la marca, Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD, subrayó el alcance del logro: “YANGWANG no reconoce lo imposible, y el U9 Xtreme es la prueba de que el futuro de la velocidad es eléctrico”.
El Yangwang U9 Xtreme se producirá en una tirada limitada de 30 unidades, un número que lo sitúa de inmediato en el radar de coleccionistas. Su denominación “Xtreme” alude a lo extremo y lo supremo, con una “X” que simboliza lo desconocido y el espíritu explorador de la marca.