En un evento celebrado recientemente, ABT Sportsline ha desvelado una reinterpretación espectacular del mítico Audi Ur-Quattro que ha dejado boquiabierto al mundo de la automoción. Esta joya, que combina el espíritu del original con tecnología de vanguardia, ha tenido una acogida tan extraordinaria que las 30 unidades previstas para su fabricación se agotaron en apenas tres horas tras su presentación.
La historia detrás de este proyecto tiene un componente emotivo. Hans-Jürgen Abt, actual director del grupo ABT, heredó un Ur-Quattro cuando tomó las riendas del negocio familiar a finales de los años 80. Aquel coche, que modificó personalmente con alas ensanchadas y piezas del Sport Quattro, marcó profundamente su trayectoria profesional. «El Ur-Quattro fue el primer coche en mi corazón y nunca ha desaparecido completamente de allí. Esta versión retro ha reavivado mi amor», confiesa Abt.
El nuevo ABT Ur-Quattro representa una evolución radical respecto al modelo original. Bajo el capó, un potente motor de cinco cilindros turboalimentado de 2,5 litros desarrolla nada menos que 530 CV, casi triplicando la potencia del Ur-Quattro original que ofrecía 197 CV. Esta impresionante cifra supera incluso los 444 CV del Quattro modificado que Hans-Jürgen condujo en su juventud.
Estéticamente, el restomod conserva la silueta icónica del Ur-Quattro pero incorpora elementos modernos que recuerdan al legendario Sport Quattro, como la parrilla frontal característica y las luces distintivas. La carrocería, fabricada en kevlar y fibra de carbono, exhibe unos pasos de rueda ensanchados que realzan su presencia, complementados por un imponente alerón trasero y un capó ventilado.
El habitáculo ha sido completamente rediseñado por ABT Original, la división de personalización de la compañía, e incluye asientos tipo baquet de fabricación propia y una jaula antivuelco «invisible». Además, los propietarios podrán personalizar el interior según sus preferencias, garantizando que cada unidad sea única.
La tecnología no se ha descuidado, incorporando sistemas modernos como frenos ABS para gestionar con seguridad toda esa potencia. Un detalle interesante es que cada chasis mantiene su numeración original, lo que permite registrar estos vehículos como coches históricos en Alemania, con las ventajas fiscales y de circulación que ello conlleva.
El éxito de este proyecto ha sido tal que ABT ya contempla lanzar nuevas reinterpretaciones de clásicos. «Estamos encantados de que este proyecto haya conectado tan bien con nuestros clientes. Nos da un poco más de valor para seguir algunas otras ideas que tenemos en mente», señaló Hans-Jürgen Abt.