BMW se prepara para un punto de inflexión en su historia con la llegada del nuevo iX3, el coche que inaugurará su revolucionaria plataforma Neue Klasse. Previsto para su debut oficial en el Salón del Automóvil de Múnich en septiembre, este SUV no es una simple actualización, sino un vehículo concebido desde cero para ser eléctrico, prometiendo un salto tecnológico que redefine el placer de conducir característico de la marca. Su producción comenzará a finales de este año en la nueva planta de Debrecen, Hungría.
El corazón de esta nueva era es el sistema de propulsión eDrive de sexta generación, que introduce avances cruciales. La clave reside en sus nuevas celdas de batería cilíndricas, que ofrecen una densidad energética un 20% superior a las prismáticas actuales. Gracias a esta mejora y a un diseño general eficiente, la versión iX3 50 xDrive apunta a una autonomía de hasta 800 km en ciclo WLTP. La arquitectura de 800 voltios permite una capacidad de carga rápida en corriente continua de hasta 400 kW, una cifra impresionante que se traduce en recuperar más de 350 km de autonomía en tan solo 10 minutos. El sistema se completa con funciones de carga bidireccional (V2L, V2H y V2G) y una ingeniosa tapa de carga que se abre automáticamente al acercarse a un punto de recarga conocido, gracias a la inteligencia artificial.
La dinámica de conducción y la asistencia al conductor alcanzan un nuevo nivel gracias a la integración de «supercerebros» o unidades de procesamiento de alto rendimiento. Uno de ellos, denominado «Heart of Joy», gestiona el sistema de propulsión con una velocidad diez veces superior a los sistemas previos, optimizando la respuesta del coche y la estabilidad. Esto se refleja en un sistema de frenada regenerativa tan avanzado que puede detener el vehículo en el 98% de las situaciones sin usar los frenos de fricción. Por otro lado, los sistemas de asistencia al conductor, con una capacidad de procesamiento 20 veces mayor, utilizan la IA para ofrecer una conducción semiautónoma más inteligente y cooperativa. El asistente para autopista y ciudad puede gestionar situaciones urbanas complejas, como rotondas o semáforos, y permite al conductor realizar pequeñas correcciones en la dirección o los frenos sin desactivar el sistema.
El interior rompe con todo lo conocido en BMW, introduciendo el innovador sistema BMW Panoramic iDrive. El tradicional cuadro de instrumentos desaparece en favor del «Panoramic Vision», una pantalla que proyecta la información clave a lo ancho de la base del parabrisas, manteniéndola en el campo de visión del conductor. Se complementa con una pantalla central de forma trapezoidal, un Head-up Display 3D opcional y un volante «shy-tech» con botones que se iluminan solo cuando sus funciones están disponibles. Todo este ecosistema es gestionado por el nuevo sistema operativo BMW Operating System X, diseñado para una interacción más intuitiva. Con su llegada al mercado prevista para finales de 2025 o principios de 2026, y un precio que se espera parta de unos 56.000 euros, el iX3 no solo se posiciona como un SUV eléctrico excepcional, sino como la nueva punta de lanza de la gama eléctrica de BMW hasta la llegada de nuevos modelos sobre dicha plataforma.
