El BMW M3 está a punto de escribir un capítulo inédito en su historia, y lo hará con la la electricidad como protagonista. La próxima generación de este icono del dinamismo no solo mantendrá viva la esencia deportiva que lo ha convertido en leyenda, sino que la reinterpretará gracias a una tecnología de propulsión completamente nueva. Por primera vez, la gama M3 ofrecerá una versión 100% eléctrica, desarrollada sobre la avanzada plataforma Neue Klasse, y promete elevar la experiencia de conducción a cotas nunca vistas.
Para quienes aún prefieran la tradición, BMW lanzará en paralelo un M3 con motor de gasolina y tecnología mild-hybrid, basado en el conocido seis cilindros biturbo, adaptado a las normativas de emisiones más exigentes y con una potencia cercana a los 600 CV.
El diseño del futuro M3 eléctrico se inspira en el revolucionario concepto Neue Klasse, con líneas limpias y musculosas, pasos de rueda ensanchados y detalles que transmiten la agresividad típica de los modelos M. Los faros y la parrilla adoptan una estética más minimalista y tecnológica, mientras que los tiradores de las puertas emergentes y las llantas de gran tamaño subrayan su carácter de alto rendimiento. Aunque los prototipos aún van camuflados, ya dejan entrever una silueta atlética, acompañadas de neumáticos Michelin de altas prestaciones que anticipan sus intenciones en circuito.
El corazón del nuevo M3 eléctrico será un sistema de propulsión de última generación, capaz de montar hasta cuatro motores eléctricos (dos síncronos en el eje trasero y dos asíncronos delante), gestionados por la innovadora arquitectura Gen6 de BMW. Esta configuración no solo permite una entrega de potencia instantánea y una vectorización de par avanzada, sino que también reduce las pérdidas energéticas en un 40% y el peso del sistema en un 10% respecto a la generación anterior, todo ello gracias a baterías estructurales de alta densidad y menor volumen.
En cuanto a cifras, aunque los prototipos de desarrollo han llegado a superar los 1.300 CV, la versión de producción del M3 eléctrico rondará los 700 CV, una cifra que lo situará muy por encima de cualquier M3 anterior y que augura prestaciones de superdeportivo. La gestión electrónica “Heart of Joy” centraliza el control de la entrega de potencia, la dirección y la tracción, procesando datos diez veces más rápido que los sistemas actuales para ofrecer una respuesta inmediata y precisa, tanto en carretera como en circuito.
A pesar de la transición al silencio eléctrico, BMW no olvida a los puristas: se especula con la posibilidad de incorporar sonidos sintéticos inspirados en el clásico seis cilindros en línea, aunque desde el exterior el M3 eléctrico destacará por su discreción sonora, dejando que el rugido de los neumáticos y el viento sean los nuevos acompañantes del conductor.