Era el rey indiscutible de las carreteras europeas hace apenas una década, pero el motor diésel confirma su desplome definitivo este 2025. Las últimas cifras de matriculaciones revelan un cambio histórico: la tecnología de gasóleo ha sido superada por los híbridos enchufables, quedando relegada a una cuarta posición que parecía impensable cuando dominaba más del 50% del mercado.
Los datos acumulados entre enero y octubre en toda Europa, incluyendo los mercados de la EFTA y Reino Unido, son demoledores. Los híbridos enchufables (PHEV) han logrado colocar 1.035.082 unidades en las calles, frente a los 878.782 coches diésel matriculados en el mismo periodo. Esto otorga a los enchufables una cuota de mercado cercana al 9,4%, mientras que los motores de gasóleo se conforman con un escueto 8%. La tendencia se aceleró especialmente en octubre, cuando la brecha se hizo aún más evidente en la UE con un 10,5% de cuota para los PHEV frente al 8,1% del diésel.
Este es el último clavo en el ataúd de una tecnología herida tras el escándalo de emisiones del Grupo Volkswagen en la década pasada. La caída ha sido escalonada pero constante: en 2017 los coches de gasolina recuperaron el trono, en 2021 los híbridos autorrecargables (HEV) les adelantaron y, un año después, los eléctricos puros también superaron sus registros.
Las estrictas normativas de emisiones y los incentivos fiscales para vehículos electrificados han empujado a los fabricantes a eliminar el diésel de los segmentos de acceso. Ya es imposible comprar utilitarios míticos como el Renault Clio o el Volkswagen Polo con este tipo de mecánica, un nicho donde antes eran imbatibles por consumo. Además, la mejora en la eficiencia de los motores de gasolina y la presión fiscal han terminado de desincentivar su compra.
Mientras el diésel agoniza, el mercado tiene un nuevo líder sólido: los híbridos convencionales (HEV). Esta tecnología ya acapara más de un tercio de las matriculaciones, rozando el 34,7% de cuota y superando cómodamente a la gasolina sin hirbidación. Por su parte, los eléctricos puros siguen ganando tracción, acumulando más de dos millones de unidades vendidas en el continente en lo que va de año y preparándose para la llegada de nuevos modelos como el futuro Renault Twingo.
A falta de ver inminentes decisiones de Bruselas sobre la prohibición de los motores de combustión en 2035, pero la sentencia del mercado actual es clara. Con una industria volcada en la electrificación y unos consumidores que apuestan mayoritariamente por la hibridación, el motor diésel ha pasado de ser la norma a convertirse en una opción residual en tiempo récord.





