El Lada Azimut, presentado durante el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, representa el primer vehículo completamente nuevo que desarrolla la compañía en más de una década, constituyendo además su primer SUV propiamente dicho.
Esta novedad cobra especial relevancia en el contexto actual, donde las sanciones internacionales derivadas de la guerra de Ucrania han obligado a la industria automovilística rusa a replantear completamente su estrategia. Tras la salida de Renault del capital de AvtoVAZ en 2022, devolviendo su participación del 68% al gobierno ruso por apenas un rublo simbólico, la marca ha tenido que reinventarse desde cero.
El Azimut surge precisamente de esta necesidad de independencia tecnológica. Los ingenieros rusos han desarrollado íntegramente este SUV compacto sin intervención externa, incorporando casi mil componentes nuevos o actualizados respecto a la plataforma base del sedán Vesta. Esta plataforma, derivada originalmente de los primeros Renault Logan y Sandero pero profundamente modificada, incluye una suspensión trasera completamente nueva y una altura libre al suelo de 208 milímetros.
Estéticamente, el nuevo modelo rompe con los cánones tradicionales de Lada, adoptando un lenguaje de diseño sorprendentemente contemporáneo que evoca claramente a los SUV europeos actuales. Sus líneas tensas y musculosas, combinadas con elementos como la parrilla frontal en forma de X característica de la marca y los faros LED integrados, consiguen una imagen robusta y moderna. Los pasos de rueda marcados, las llantas de aleación de 18 pulgadas y la carrocería bicolor refuerzan su carácter todoterreno.
En el habitáculo, Lada ha apostado por la modernidad con un salpicadero dominado por dos pantallas: una para la instrumentación digital y otra táctil de 10 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento. Este último ha sido desarrollado conjuntamente con las empresas tecnológicas rusas Sber y Navio, evidenciando la estrategia de autosuficiencia tecnológica.
Mecánicamente, el Azimut arrancará con dos propulsores de gasolina atmosféricos: un 1.6 litros de 120 caballos y un 1.8 litros de 132 caballos, ambos asociables a cambio manual de seis velocidades o transmisión automática CVT. Posteriormente se incorporará un motor turboalimentado de 150 caballos con caja automática más avanzada.
La producción comenzará en 2026 en la histórica planta de Togliatti, con precios estimados entre 27.600 y 33.100 euros según los medios locales. Aunque inicialmente se comercializará exclusivamente en Rusia debido a las actuales circunstancias geopolíticas, AvtoVAZ no descarta futuras exportaciones a mercados de Europa Oriental y Asia Central.
