Tras una década para olvidar en lo que respecta a modelos deportivos de marcas japonesas, desde hace un lustro aproximadamente, poco a poco han ido retornando a la senda de la fabricación de coches deportivos para completar sus gamas. Y mucha culpa (en el buen sentido de la palabra) lo han tenido las marcas en el viejo continente, que han sabido contar con una amplia gama de variantes deportivas en gran parte de los segmentos, cosa de la que no han podido presumir las niponas… hasta la fecha.
Remontándonos un par de décadas atrás, posiblemente recuerdes el Subaru SVX. Un modelo que resultó muy llamativo –y sigue resultando– no tanto por ser el deportivo más alta gama de la época de Subaru, sino por su diseño realizado por Giugiaro.
Subaru quiere plantar cara a otros deportivos marcas de su misma nacionalidad
Este diseño tenía particularidades como sus ventanas, que prescindían de los pilares típicos a fin de poder mejorar la aerodinámica y visibildiad interior. En la época, logró un coeficiente aerodinámico de 0,29 Cx. Además, contaba con un propulsor bóxer modelo EG33 de 3.3 litros con 6 cilindros con una potencia de 230 CV, cambio automático de 4 velocidades y tracción a las cuatro ruedas. Estuvo en producción entre 1992 y 1997 y con un total de 25.000 unidades producidas.
Pues bien, desde Subaru estarían planteándose resucitarlo para así poder rivalizar con modelos como el nuevo Honda NSX, ya que contaría con un sistema de tracción total y mecánica híbrida, formada por un 3.3 bóxer de 6 cilindros de nuevo desarrollo con un sistema híbrido desarrollado conjuntamente con Lexus una potencia total de 380 CV.
La plataforma empleada, por su parte, sería la conocida como SGP (Subaru Global Platform) que empleará en primer lugar el Tribeca cen el año 2016, y se producirá en la planta de Subaru en Indiana, dado que su principal mercado será el americano. De ser cierto todo esto, deberíamos verlo materializado en el mercado en el año 2017.
