Hemos visto el prototipo que nos anticipa la variante de producción (el Alpine Celebration Concept) e incluso, las patentes que revelan el aspecto de la versión de producción extraídas directamente desde la oficina de patentes. Vamos, que todo parecía bastante avanzado, de hecho, esperábamos conocer el modelo definitivo en el Salón de París del año 2016, que se celebra en el mes de Septiembre…
Sin embargo, si eres de esos que esperaba con ansia la vuelta al ruedo de Alpine deberás respirar profundamente y seguir anhelándolo durante algunos meses más. Este retraso lo podemos conocer de la mano del jefe de Alpine, Bernard Ollivier, que en declaraciones a Motoring durante el transcurso del Festival de Velocidad de Goodwood lo ha hecho oficial, alegando que quieren estar seguros de que el vehículo que lancen al mercado sea absolutamente perfecto (palabras textuales).
Hay que tener en cuenta que en este caso no supone únicamente el lanzamiento de un modelo (aunque será el eje de su relanzamiento), sino el de toda una marca, algo que lo hace un proceso mucho más complejo y delicado si no quieren tener que volver a meterla en el congelador a corto plazo porque resulte ser un fracaso. Así que están aplicando la máxima de «despacito pero con buena letra».
No sabemos, eso sí, una fecha concreta sobre cuándo se materializará todo esto en el mercado, más allá de que será a lo largo del año 2017.
Vía: Motoring
