Toyota acelera su ofensiva eléctrica con el nuevo C‑HR+, un SUV coupé 100% eléctrico que crece frente al C‑HR híbrido y se asienta sobre la plataforma e‑TNGA. Arranca su venta en España con la batería grande de 77 kWh y dos niveles de potencia, situándose entre Urban Cruiser y bZ4X. Llega con cifras de autonomía y prestaciones pensadas para el corazón del segmento C‑SUV.
Aunque comparte nombre con el C‑HR, es un modelo independiente y de mayor tamaño: 4,52 m de largo, 1,87 m de ancho y 1,60 m de alto, con 2,75 m de batalla. Luce rasgos del prototipo bZ Compact SUV Concept y unos faros tipo “cabeza de martillo” más finos, además de una marcada caída de la luneta trasera. Toyota promete una habitabilidad por encima de lo habitual en su clase, y declara 416 litros de maletero.
La gama española debuta con dos opciones ligadas a la batería de 77 kWh. El C‑HR+ Advance 225 77 kWh entrega 224 CV y 269 Nm al eje delantero, acelera de 0 a 100 km/h en 7,4 s, alcanza 160 km/h y homologa 600 km WLTP. Por encima, el C‑HR+ Spirit 345 AWD‑i 77 kWh monta dos motores, suma 343 CV y 438 Nm, firma 0 a 100 km/h en 5,2 s, 180 km/h de punta y 475 km WLTP. La versión más básica con 57,7 kWh y 167 CV, de tracción delantera, se incorporará más adelante.
El C‑HR+ apuesta por la plataforma e‑TNGA y ofrece gestión térmica cuidada con bomba de calor y preacondicionamiento de batería. La carga en corriente alterna llega hasta 11 kW de serie y sube a 22 kW con el cargador embarcado del acabado superior, mientras que en continua alcanza 150 kW. Incluye además freno regenerativo con levas para modular la retención.
El equipamiento también marca diferencias. El Advance incorpora llantas de 18 pulgadas, volante multifunción calefactable, portón trasero motorizado, asientos delanteros calefactables, climatizador bizona, instrumentación digital de 7 pulgadas y pantalla central táctil de 14 pulgadas con navegación, junto a cámara de visión trasera y el paquete Toyota Safety Sense. El Spirit añade llantas de 20 pulgadas, carrocería bitono, techo panorámico con cortinilla eléctrica, llave inteligente digital, equipo de sonido JBL con subwoofer, cámara de visión 360 grados y sistema de aparcamiento avanzado, además del cargador de a bordo de 22 kW.
El desembarco comercial será escalonado en Europa y España figura entre los primeros mercados, con precios sin ayudas ni promociones de 36.500 euros para el Advance 224 CV 77 kWh y 44.000 euros para el Spirit AWD‑i 343 CV. Con estas tarifas, cuenta con una ventaja favorable frente a rivales como Volkswagen ID.4 o Peugeot E‑3008, que en sus versiones básicas rondan los 40.000 euros, y muy parejo a propuestas como OMODA 5 EV o BYD Atto 3, con el plus de tamaño y capacidad.