Los coches pueden ser un hobby, pero dentro de ellos, hay muchas especializaciones. Y es que, por ejemplo, puede ser nuestro hobby conducir, pero que por ejemplo no nos guste mancharnos las manos con la mecánica. O de la misma forma, también puede ocurrir a la inversa. O, simplemente, que nos gusten ambas cosas, ya sea un poco por obligación (que nuestro coche esté preparado, que por tanto hayamos mermado su fiabilidad y necesite más atenciones) o porque verdaderamente nos guste tener nuestro coche en perfectas condiciones mecánicas por nosotros mismos.
Bien, supongamos que queremos embarcarnos en un proyecto de coche para darle una segunda juventud, aprender mucha mecánica, ponernos metas, tener un entretenimiento los fines de semana y sobre todo pasárnoslo bien en la medida de lo posible. «El coche del fin de semana» (y no me refiero sólo al coche para pasear los findes, también para meterle mano) está mucho más popularizado en sitios como EEUU o Reino Unido -aunque es una práctica que se está extendiendo- donde es habitual ver como en sus propios garajes se hacen proyectos espectaculares. ¿Quieres ver algunos? Ahora mismo, a bote pronto, se me ocurre el foro de proyectos de Driftworks, donde puedes ver proyectos documentados con todo tipo de detalles y fotos en el que podrás aprender mucho.
Vale, quiero hacer un proyecto�?�
Para tener un proyecto, no hacen falta grandes conocimientos, porque uno de los objetivos del proyecto puede ser ese, aprender mecánica, y nadie nace sabiendo. Podremos leer y documentarnos mucho (que es lo que haremos siempre antes de hacer algo, documentarnos para conocer el proceso y los pasos a seguir), pero sin la parte práctica de nada nos sirve. Así que en primer lugar nos hacen falta ganas, ilusión y predisposición a mancharnos las manos.
En segundo lugar, nos hace falta dinero. Tanto para la adquisición del coche que será la base del proyecto, como para todo lo que venga después (piezas para el coche, herramientas, recambios, entre otros).
En tercer lugar, un lugar donde poder trabajar.
«El coche»�?�
Vamos a elegir el coche. Damos por hecho que nos enfocamos a coches de segunda mano, y preferentemente con algunos años a sus espaldas. Básicamente, porque en un coche nuevo todo funciona a la perfección, y si le empezamos a meter mano tendremos problemas relacionados con la garantía del coche, así que a menos que tengamos una economía muy boyante esta opción no nos interesa.
Así pues, nuestro objetivo va a ser un coche con algunos años a sus espaldas. Dentro de este marco, podemos tomar distintos caminos:
– Comprar un coche «hecho polvo» y con paciencia resucitarlo y dejarlo como nuevo
– Comprar un clásico para restaurarlo y dejarlo como recién salido de fábrica
– Comprar un deportivo para prepararlo para hacer grip o drift
– Preparar un coche para circuitos
– Hacer swaps de motor
El campamento base
Necesitaremos un lugar donde poder trabajar con nuestro proyecto, y tenemos varias opciones. Si vivimos en una casa con un garaje individual, en principio, si contamos con agua y luz, adecentando un poco el garaje con estanterías para colocar toda la herramienta bien, nos puede quedar una zona de trabajo bastante atractiva. Si queremos rizar el rizo, podemos construir un pequeño foso para realizar ciertas tareas.
Pero si nuestra casa no dispone de garaje individual, tendremos que sopesar otras opciones. Supongamos que tenemos garaje comunitario. En algunos casos, los estatutos del garaje prohiben realizar tareas de mantenimiento del coche en el mismo, así que como última instancia en caso de que sea pequeño el garaje siempre podemos hablar con los vecinos para ver si se puede hacer un poco la excepción. Si tenemos un trastero, luz y agua en el garaje comunitario mucho mejor, aunque en términos generales estaremos más limitados que en el caso anterior. Huelga decir, que siempre intentaremos dejar todo tal cual estaba de limpio, para no causar molestias a ningún vecino.
Y finalmente la opción más razonable: juntarse con varios amigos que también busquen el mismo objetivo, para alquilar una nave entre todos. Nos puede salir una cuota mensual bastante pequeña (unos 150 euros mensuales), y podremos optar por ejemplo por comprar un elevador entre todos para que así salga económico y compartirlo entre todos, además de solicitar ayuda a nuestros colegas cuando la necesitemos, disfrutando también de servicios como luz, agua, etc�?�
Herramienta imprescindible
Bien, una vez cumplidos los puntos anteriores, necesitaremos herramienta para poder meterle mano a nuestro coche. En función de lo que vayamos a hacer, necesitaremos unas cosas u otras, pero lo cierto es que hay una serie de elementos básicos que no pueden faltar.
Empezando por la clásica maleta de carracas y vasos, que podemos encontrar en cualquier tienda de recambios, y grandes superficies de ferretería. Personalmente, os aconsejo que os gastéis algo más de dinero en una caja de marca, más allá de las típicas chinas, que tienen una duración bastante limitada (las carracas se rompen, los vasos se hacen redondos, entre otros). En principio, una caja de calidad media nos saldrá por unos 70 euros aproximadamente. Si queremos una más completa, podemos optar por una Mannesmann que incluye también juego de llaves fijas y sale por unos 100 y pocos euros. Si la caja de herramientas que compremos no lleva llaves fijas, es imprescindible comprar un juego de llaves fijas, al menos en medidas más típicas, y preferentemente de calidad, porque si las compramos marca la guitarra corremos el riesgo de que se nos abran las puntas y sean inservibles.
Gato y borriquetas. Imprescindible para levantar el coche el primero, y el segundo por seguridad o para mantenerlo levantado durante cierto tiempo. En los gatos también hay mucha variedad de precio, estando desde los típicos gatos baratos de 15 euros, que son pequeños, pero que tienen la problemática de que hay que realizar mucho más movimiento para levantar el coche y con el tiempo pierden eficacia, y por otra parte tenemos los gatos profesionales que usan en talleres y que valen a partir de 200 euros, que son mucho más pesados y menos manejables, pero nos permitirán levantar el coche con mucho menos esfuerzo, y coches más pesados.
Otras herramientas. No estaría de más que compráramos un maletín de plástico y en ella metiéramos herramientas variadas, como una llave inglesa, alicates, tijeras, guantes, alicates de corte, destornilladores de varios tipos, dinamométrica, así como otros útiles tales como fichas, cables, etc.
Esto como herramientas imprescindibles. Luego ya, en función de lo que queramos hacer, optaremos por adquirir otras cosas, pero con esto ya podremos hacer muchas tareas que nos propongamos.
Otras consideraciones
Dependiendo de las modificaciones que hagamos, tendremos que legalizarlas posteriormente pasando el proceso de homologación en España. Y para dicho proceso de homologación se nos exige entre otras cosas, un certificado de montaje por un taller autorizado, eso puede suponernos un problema a la hora de homologar si hemos hecho nosotros casi todo el proceso.
Debes mentalizarte de que todo lo que te propongas arreglar, cambiar, modificar o instalar no te saldrá bien a la primera, es posible que se te hagan redondos algunos tornillos, que rompas algunas piezas intentando desmontarlas, que se te pasen las roscas, que haya momentos en los que te gustaría pegarle fuego al proyecto. Pero no desistas. Como se suele decir, todo esfuerzo tiene su recompensa, debes pensar en todo momento como lucirá tu proyecto cuando lo acabes y lo orgulloso que te sentirás de él, en ese momento echarás la vista atrás y recordarás las adversidades con las que te has encontrado en el camino con una leve sonrisa.