¿Recuerdas aquel mini-documental acerca del pintado que recibe el Bentley Mulsanne? Es quizás uno de los más cuidadosos procesos que recibe a la hora de fabricación, y no es para menos. Al fin y al cabo, es lo primero que resalta de la enorme berlina, ¿no?
El fabricante británico ha afirmado que tardan un total de 86 horas en comenzar y finalizar todo el proceso, o lo que es lo mismo… nada más y nada menos que 4 días completos. ¿Qué te parece?
Los requisitos para la pintura son de lo más variopinto, y es que de poco sirve la paleta de colores estándar, que consta de un total de 120 colores diferentes. Bentley asegura a sus clientes que pueden conseguir absolutamente cualquier color que el cliente quiera, y eso va desde una pintura de un coche antiguo hasta el reflejo de una comida.
Vía: Motor Authority