Tras 1.700 unidades producidas, la versión más radical del Mercedes-AMG GT, el GT Black Series ha llegado a su fin, tal y como afirman desde el medio MB Passion. Este modelo se presentó en Julio de 2020, trayéndonos de nuevo el nombre de Black Series que se encontraba en desuso desde el año 2014.
De la mano del V8 biturbo de 4 litros con sustanciales modificaciones internas respecto al bloque del resto de la gama AMG GT, cuenta con 730 CV entre las 6700 y 6900 rpm, con un par máximo de 800 Nm. El resultado en términos de prestaciones es un 0-100 km/h en 3,2 segundos, un 0-200 km/h en menos de nueve segundos y una velocidad máxima de 325 km/h. Mantiene la caja de cambios de doble embrague y siete velocidades, pero reforzada para soportar mayor par.
También cuenta con un gran trabajo en materia aerodinámica debido a su enfoque circuitero -aún estando homologado para calle-: alerones activos, múltiples apéndices aerodinámicos, splitter delantero ajustable, salidas de aire de gran tamaño en pasos de rueda y fondo plano. Todo ello se complementa con llantas de 19 delante y 20 detrás con neumáticos Michelin Pilot Cup 2 R MO1A, suspensión pilotada, interior con asientos de tipo backet en fibra de carbono y jaula antivuelco.
En 2020 logró establecer un tiempo récord para coches de producción en Nürburgring al detener el crono en 6 minutos y 43.61 segundos, si bien tiempo después el Porsche 911 GT2 RS de Manthey Performance consiguió bajarlo hasta los 6:38.835 minutos.
El precio en España es de nada menos que 415.000 euros (305.709 euros sin impuestos).
