Pongámonos en antecedentes. Recientemente, el gobierno anunció su plan de austeridad para éste año, y uno de los puntos pasaba por la reducción del sueldo de los funcionarios, entre los que se incluyen los agentes de la Guardia Civil.
Evidentemente, esto no gustó a muchos funcionarios, incluyendo los de la Guardia Civil, y es ahora Pere Navarro, director de la DGT, quien ha salido a denunciar que hay algunos agentes dentro del cuerpo haciendo huelga de bolígrafos caídos, es decir, haciendo que muchas infracciones se queden en simples advertencias y dejando de recaudar una suma importante de dinero para las arcas del estado. En cualquier caso, según parece sólo se está aplicando a las sanciones leves.
Todo apunta a que dicha protesta no ha sido organizada por ningún sindicato, sino que se ha realizado entre los agentes a través Internet, ya sea vía correo electrónico o en foros. Por lo pronto, la asociación profesional Independientes de la Guardia Civil (IGC) ha confirmado un drástico descenso en el número de denuncias interpuestas a los conductores.
Vía: Xornal
