El fabricante alemán de Stuttgart ha presentado hoy sin más preludios el nuevo Porsche 911 Turbo S, que revive la leyenda del pasado Turbo S, y que se presenta como un final de generación muy, muy interesante.
Porsche ha decidido poner la puntilla a la generación 997 con una variante más, basada en el actual Turbo y que se presenta como una alternativa a los que no tienen suficiente con el ya de por sí renovada versión turboalimentada del coupé, que pasó de ofrecer 480 a 500 caballos.
¿Qué nos encontramos? El 911 Turbo S presenta una potencia final de 530 caballos, a la par que mantiene un consumo igual que el Turbo estándar. ¿Es suficiente?
Contando con la caja de cambios PDK -automática y secuencial de 7 velocidades-, está previsto que sea capaz de alcanzar los 100 kilómetros por hora desde parado en sólo 3.3 segundos, sacándole cuatro décimas al 911 GT2, pero perdiendo con éste en lo que a velocidad terminal se refiere.
Ahora bien, la pregunta es… ¿es realmente necesaria una variante más potente del Turbo? Recordemos que el GT2 es una variante aligerada y más orientada a la competición derivada del modelo base turboalimentado, y que ofrece la misma potencia que el nuevo S.
La respuesta es que… ¿por qué no?Porsche ha tenido un movimiento muy interesante, ya que ofrece las mismas prestaciones que el GT2, pero con tracción total y una orientación al confort y la tranquilidad en carretera igual que el Turbo.
El nuevo 911 Turbo S se ofrece con carrocería coupé y cabrio, y ambos serán presentados en el próximo salón de Ginebra.
Vía: Porsche
