Stellantis ha anunciado que suspende temporalmente la producción en seis plantas europeas, incluidas Vigo y Madrid, ante el estancamiento de las ventas comunitarias. La medida busca ajustar los inventarios acumulados antes de cierre de año en un mercado que apenas creció un 0,3% en los ocho primeros meses.
Mientras las matriculaciones europeas se mantienen prácticamente estancadas con ese marginal 0,3%, Stellantis ha perdido un 6,6% en el mismo periodo. Esta brecha de más de seis puntos porcentuales ha obligado a Stellantis a mover ficha para evitar una saturación de inventarios costosa.
La paralización afectará de manera escalonada a centros neurálgicos de la producción europea. Además de las plantas españolas, se detendrán Poissy en Francia, Pomigliano en Italia, Tychy en Polonia y Eisenach en Alemania. En Vigo, especializada en vehículos comerciales ligeros como las populares K9 que engloban Citroën Berlingo y Peugeot Partner, el impacto será significativo dado su volumen de producción. Madrid, centrada en modelos Citroën, atraviesa mínimos de eficiencia desde hace varios ejercicios.
El nuevo consejero delegado Antonio Filosa ha puesto el foco en «incrementar ingresos y volúmenes para revertir la tendencia negativa». La compañía confía en que los próximos lanzamientos marquen un punto de inflexión: el Citroën C3 y C3 Aircross, el Opel Frontera y el Fiat Grande Panda deberían poder impulsar las ventas y reducir el impacto de estas medidas.
Además, la presión se intensifica con la competencia china emergente, liderada por BYD, que obliga a toda la industria europea a replantearse capacidades y estrategias, si bien todavía la cuota de mercado de las marcas . Stellantis mantiene, no obstante, posiciones sólidas en nichos como el comercial ligero, donde suma un 29% de cuota en la Unión Europea entre todas sus marcas.