La gama del actual Porsche 911 Turbo y Turbo S es muy completa, ofreciendo la máxima tecnología sin tener que renunciar a diversas comodidades para otorgar una mayor potencia y sensaciones de conducción, como ocurre con el GT2. Pero en la búsqueda de maximizar todo lo posible las capacidades dinámicas del 911, el roadmap de Porsche para estas dos variantes, es muy, muy jugoso.
Desde Alemania y a raíz de informaciones muy fiables, podemos dar por hecho que en Porsche van a implantar la tecnología del 918 Spyder en más modelos, y esto incluirá tanto el Panamera, como el 911 Turbo S. En el caso de la berlina está claro que será en la próxima generación, pero hablando del 911 Turbo S, podría ser incluso antes. ¿El secreto del éxito? Un sistema híbrido similar al del 918 Spyder, para conseguir un 911 Turbo S especial, muy avanzado en cuanto a tecnología, y lo más importante… con 700 caballos de potencia.
El cerco se estrecha
Actualmente, el 911 Turbo S es bastante más potente que el Turbo estándar (560 frente a 521 caballos), pero el mercado de éste se queda algo lejos de este rango de potencia, ya que rivales como el Ferrari 458 Italia, superan en potencia al alemán. Mirándolo de esta manera, un objetivo claro y conciso puede ser otorgar al 911 Turbo más potencia, y dar un giro radical con el Turbo S para maximizar una tecnología de puro éxito y que parece ser el futuro de estos coches. Al fin y al cabo, en el 918 Spyder ya ha quedado más que corroborado…
El 911 Turbo S recibirá el mismo motor eléctrico que el del 918 Spyder, con una potencia comprendida entre 120 y 150 caballos, sumado por supuesto a un pack de baterías de litio-ión. Con esto en mano será más potente que el GT2, aunque la filosofía será muy diferente. De confirmarse, tendríamos entre mano el esperado coche para rellenar el hueco entre el GT2, y el 918 Spyder.
