Posiblemente, hayas tenido que releer el titular en varias ocasiones porque no lo hayas acabado aún de asimilar, y ciertamente, a nosotros también nos ha sucedido. Audi, perteneciente al grupo Volkswagen, ha optado por denunciar a su matriz Volkswagen en la Fiscalía de Ingolstadt (sur de Alemania) con el objetivo de contribuir al proceso de esclarecimiento del escándalo de manipulación de emisiones de gases.
Como recordarás, Volkswagen ya hizo público hace una semana que habían 11 millones de vehículos en todo el mundo con el software de manipulación de emisiones que reconoce cuando el coche está realizando conducción normal y cuando está realizando el test de emisiones para de esta forma cambiar su cartografía y reducir sus emisiones de gases. Del total de dicha cifra, 2,1 millones de unidades corresponden a Audi.
A Volkswagen no paran de crecerle los problemas. Por una parte, la pérdida de imagen de marca, pero por otra, el frente más difícil de abordar: el ámbito legal, con demandas por parte de usuarios, asociaciones e incluso gobiernos. Fuertes sanciones que deberán abordar y que estos días los analistas se cuestionan si realmente Volkswagen tiene capacidad financiera para poder salir airosa de toda esta situación.
Desde Audi, y pese a ser una marca del grupo, no quieren sufrir el efecto ‘contagio’, o al menos, de una forma no tan tajante. En mercados como el americano les ha costado muchos años remontar las ventas de la polémica del Audi 5000 que supuestamente se aceleraba solo y no frenaba, llegando incluso la TV americana a hacer una burda manipulación demostrándolo, aunque evidentemente era falsa, puesto que el único problema es que el Audi 5000 tenía una disposición de pedales más bien europea, con un pedal de freno más pequeño y cercano al acelerador que en los coches americanos, por lo que la gente se equivocaba con el juego de piernas. Y ahora, llega esta polémica del escándalo de emisiones que nuevamente tira por tierra todos estos años de sacrificio y esfuerzo en aquel mercado, de ahí que hayan interpuesto la demanda con el objetivo de intentar desmarcarse al máximo posible de Volkswagen, aunque en la práctica, como comentamos, sea una marca del grupo que cuenta con el 99,6% de las acciones.
