Retrocedamos un poco en el tiempo. Seguramente, muchos recordéis la noticia de que el Land Rover Defender 2011 era incompatible con las nuevas normativas de emisiones que entraron en vigor al no haber lanzado la marca un propulsor adpatado y que por ello únicamente podría adquirirse como vehículo industrial.
En concreto, Land Rover lanzará un propulsor de 2.2 litros con 122 CV de potencia y un par de 36,73 mkg a 2.000 rpm, que cumple la normativa de emisiones EURO 5 y mejorando además las prestaciones sobre el anterior, ya que ahora es capaz de alcanzar 145 Km/h en lugar de 132 Km/h. La potencia es idéntica a la del anterior propulsor de 2.4 litros al que reemplaza.
Para lograr que sea capaz de cumplir la normativa EURO 5, se le ha dotado de un filtro antipartículas DPF. Por tanto, sus emisiones se sitúan en los 266 g/km en el modelo 90 y 295 g/km para los modelos 110 y 130.
En España, la gama del Defender arranca en los 30.350 euros del 90 SW E.
