El BMW 1M es uno de esos coches que podríamos decir que ha nacido como futuro clásico: se trata de una tirada limitada, radical, con un amplio potencial de potenciación y no hay más que irse al mercado de segunda mano para ver como sus precios se mantienen en una senda bastante estable, sin prácticamente devaluación, algo que nos deja buena cuenta de los precios que pueden alcanzar en unos pocos años.
Pero ahondando un pooc más en sus posibilidades de potenciación, hoy, de la mano de Alpha-N te sintetizamos claramente una de esas posibilidades. El modelo de serie cuenta con 340 CV, pues bien, este preparador logra aumentar su potencia a los 572 CV.
Para lograrlo, se sirve de unas bujías nuevas acompañadas de sus respectivas bobinas, bomba de gasolina de mayor caudal, intercooler de mayor tamaño, turbo de nueva referencia, así como un sistema de inyección de agua y metanol. Y claro, cómo no, una reprogramación de la ECU para ser capaz de gestionar todas estas modificaciones. Para lograr que sea capaz de digerir esta nueva potencia con fiabilidad, también se ha instalado un nuevo embrague acompañado de un volante monomasa.
También, su paso por curva también se ve mejorado debido a que incorpora una suspensión roscada de ?hlins, mientras que su estética tiene un enfoque ligeramente más deportivo con un labio frontal y alerón trasero. El interior se beneficia de algunas piezas de BMW Performance nutridas en alcántara para aumentar el aura de competición que se respira dentro.
