Desde que llegara el Honda CR-Z al mercado, el gran talón de aquiles del modelo ha sido su ajustada potencia. 136 CV en su última evolución que erogaba el conjunto híbrido bajo un cambio manual de seis velocidades y que fue la única opción disponible mientras el modelo se comercializó, pese a las insistencias por parte de los seguidores de la marca en el lanzamiento de una variante más potente.
Pero quizá te preguntes, si hay algunos coches en el mercado como el Suzuki Swift Sport con una potencia similar y no reciben críticas en ese ámbito. Sí, es cierto, el problema en el CRZ es que su estética levantaba demasiadas expectativas a nivel prestacional. Aunque su fracaso comercial no debemos únicamente achacarlo a la falta de una variante más prestacional, también es cierto que sus plazas traseras, pese a ser un 2+2, eran más bien inútiles y además su salpicadero contaba con un diseño barroco que no a todos convencía.
Entonces, ¿qué pasaba? El CR-Z tenía una puesta a punto envidiable, una dirección con un feeling espectacular, el tacto del cambio y su comportamiento en curvas, muy por encima del conjunto mecánico. Y es precisamente por eso, junto con lo anterior, por lo que siempre hemos anhelado ver un K20 (el motor del Civic Type R) bajo ese capó, algo que no llevaron a cabo alegando falta de espacio, pero hemos podido ver algunos swaps hechos y funcionando, así que como ser posible, lo era.
La opción que te ofrecemos hoy viene de la mano de Honda Performance Developments para el mercado americano. Y es que, han puesto a la venta un kit de compresor volumétrico como un accesorio de la marca, algo que evidente ofrece más garantías que uno aftermarket a priori. Dicho kit aumenta la potencia hasta los 200 CV, que ya es una cifra mucho más respetable y prestacional que la que oferta de serie. Dicho kit consta de inyectores de mayor caudal, ECU optimizada, intercooler, filtro de mayor caudal además del compresor. El precio del kit es de 4.130 euros al cambio actual.
Si quieres completar el aumento de potencia, se ofrece también un diferencial de deslizamiento limitado, además de un embrague deportivo. Eso sí, desconocemos el precio de estos dos últimos elementos.
