Estas fotos tomadas en la fábrica de Renault de Rumanía nos enseñan por encima qué se guardaba el Grupo Renault respecto al lavado de cara de su sedán estrella, y no es poco. El lavado de cara del Dacia Logan lo convierte prácticamente en un nuevo modelo, salvando las distancias.
Básicamente nos encontramos con unos paragolpes ligeramente modificados y unos faros delanteros y traseros renovados, además de una parrilla frontal nueva y algún que otro cambio interesante. Es un buen refresco teniendo en cuenta que la segunda generación llegará en unos años, y que este movimiento será más que suficiente para mantenerlo en el mercado sin problemas.
Vía: CarScoop