El Porsche 911 de actual generación tiene aún varios años de vida por delante. Y es que el 911 más avanzado hasta la fecha fabricado por Porsche ha renovado hace tan solo unas semanas la gama del 911 GT3, y con la incorporación -por primera vez en su historia- del uso de turbocompresores en prácticamente toda la gama al completo del coupé deportivo alemán, las mejoras continúan en camino… pero el próximo cambio de suma importancia, no lo veremos en la presente generación, sino en la siguiente.
Sabiendo que el último en llegar está cerca de hacerlo -será el regreso por todo lo alto del 911 GT2-, la nueva generación del Porsche 911 se perfila para debutar a finales de década, y lo hará con un modelo híbrido bajo el brazo. Por primera vez en la historia del 911 veremos la incorporación de un set-up híbrido compuesto por un kit de baterías de litio-ión y al menos, un propulsor eléctrico. La pregunta es… ¿cómo combinará la marca alemana este modelo en la gama del 911? Y lo más interesante de todo… ¿en qué gama de potencia se moverá?
Es apasionante pensar en que el Porsche 911 992 contará con un modelo Turbo que estará compuesto, en parte, por una configuración de híbrido. Es una de las posibles posibilidades, ya que serviría para aumentar la potencia del alemán, reducir las emisiones contaminantes, y también apostar por una nueva forma de tracción integral, situando el motor eléctrico en el eje trasero. Otra posibilidad es que sea el Carrera 4S el que adopte esta configuración, o incluso el GTS. Las posibilidades son muy amplias, incluso se baraja que sea el Turbo S el que reciba estos goodies que podrían catapultarlo a una cifra de 650 caballos sin despeinarse.
