Los chicos de Senner Tuning le han metido mano al Audi A5, bautizado como Black & White, y que como puedes observar, el preparador ha optado por una preparación discreta, deportiva y desde luego que no deje indiferente a nadie.
Con unos bajos deportivos, un kit de fibra de carbono que abarca ambos paragolpes y que se complementa con unos espejos de material aligerado. Junto a ello, unas llantas exclusivas blancas y negras ponen la puntilla a un blanco brillo como color de carrocería, y una parrilla totalmente negra.
El propulsor que mejor se adapta a la preparación a juzgar por Senner es el 3.0 TDI, que ha sido aumentado hasta desarrolla nada más y nada menos que 300 caballos, 600nm de par y una velocidad máxima limitada electrónicamente a 280 kilómetros por hora.
Via: WCF