Cuando hablamos de la época dorada del automóvil por parte de las marcas niponas, es ineludible asociarla a la década de los ’90. Por aquel entonces, Mitsubishi en su catálogo, además de contar con modelos como el EVO, FTO, Galant VR-4 o Eclipse, contaba también con uno muy especial: el 3000GT (también conocido en otros mercados como Mitsubishi GTO o Dodge Stealth). Un modelo que estaba especialmente pensado para el mercado americano, cosa que no es difícil deducir por algunas de sus características.
La primera generación de este GT, pese a haber sido lanzada en el mercado en 1990, contaba con un gran arsenal tecnológico, destacando aerodinámica activa que permitía ajustar electrónicamente el lip delantero y el alerón psoterior, suspensión regulable en dureza electrónicamente, tracción a las cuatro ruedas y cuatro ruedas direccionales. Asociado al propulsor V6 de 3 litros con código 6G72 que lo podíamos encontrar en variante atmosférica o twin-turbo que era especialmente frugal en prestaciones pese a que el peso del conjunto no era especialmente liviano. Todo ello combinado con una estética no menos sorprendente, hizo, que para muchos, este coupé nipón fuera uno los sueños húmedos de nuestra adolescencia.
Sus rivales naturales eran algunos modelos tan míticos como el Mazda RX7 FD3s, el Toyota Supra MKVI, el Nissan 300ZX TwinTurbo… sí, a nosotros también nos encantaría poseer una máquina del tiempo para volver a vivir aquella época.
Nos aterra pensar que el cambio de nombre y modelo pueda deberse a cuestiones relacionadas con que este modelo vaya a estar escalones por debajo en rendimiento o eficacia
El anuncio por parte de Mitsubishi en el que afirmaba no tener un sucesor preparado en la cantera para el actual EVO X, nos supuso un duro golpe a los seguidores del modelo, pero también a los fanáticos de la marca, porque esta decisión suponía que cuando su producción cese, dejar sin su único bastión deportivo que nos recordaba que Mitsubishi en el pasado no era una marca dedicada sólo a la fabricación de coches respetuosos con el medio ambiente y carentes de espíritu.
Pues bien, parece ser que dentro de Mitsubishi, estarían considerando heredar el legado del EVO resucitando otro modelo, como es en este caso el 3000GT. Al menos, así podemos sacar en claro con las palabras pronunciadas por parte de Lance Bradley, director general de la división de Mitsubishi Reino Unido.
Y los rumores que oíamos de que la próxima generación del EVO sería híbrida (en este caso, materializada a través de otro modelo como herencia de su legado), no iban tan desencaminados. Además del cambio de filosofía de pasar de un sedán de cuatro puertas a un coupé 2+2, implicaría también la introducción de un sistema híbrido que podría partir sobre la base del Outlander PHEV para asegurar unas prestaciones acordes y empleando la plataforma del ASX.
Vía: AutoExpress
