Como seguramente ya sepas a estas alturas, la nueva -y décima- generación del Honda Civic vuelve a sus orígenes al convertirse nuevamente en un producto global, en lugar de hacer distinción en función del mercado (USA/Europa/Japón). En concreto, la factoría de Swindon será la encargada de producir las unidades que irán destinadas a nada menos que 70 países alrededor del mundo, entre los que se incluyen mercados europeos, norteamericanos y Canadá, una fábrica que tiene el honor de haber fabricado varias de las generaciones anteriores del modelo.
La cuestión es que a pesar de haber visto ya las imágenes del modelo para el mercado americano en todo su esplendor, y tratándose de un modelo de carácter global, no esperar muchos cambios en las unidades de especificación europea, aún no habíamos visto imágenes en esta guisa… hasta hoy. Tal y como era de esperar, los cambios son muy sutiles: fundamentalmente, la versión Sport pasa a contar con los escapes en el centro del paragolpes mientras que en el caso de la versión americana los tiene a la derecha del paragolpes o los intermitentes laterales que pasan de ser naranjas a ser blancos.
A Europa llegará con los motores 1.0 de tres cilindros de 129 CV y el 1.5 de 182 CV, ambos sobrealimentados, con una característica común también: la elevada cifra de par que entregan por debajo de las 2000 vueltas. Las cajas de cambio disponible serán una manual de seis velocidades o una automática CVT de siete velocidades. Poco después, en 2017, llegará el diésel de 1.6 litros y 120 CV, imprescindible también en el viejo continente donde en el caso del Civic actual acapara el 30% de las ventas.
En Europa recibiremos también la variante Sedán que se comercializa en Estados Unidos, aunque en este caso no serán los británicos quien se encarguen de pararilo, sino que se realizará en la planta de Gebzé en Turquía, no comenzando a venderse hasta el próximo año.
El sedán es el mas bonito