Aunque Honda ya cuenta desde hace varios años con un control de crucero adaptativo en Europa similar al que podemos encontrar en otros modelos del mercado (concretamente, desde la séptima generación del Accord europeo), ahora ha presentado una gran evolución de dicho sistema que recibe la denominación i-ACC y que resulta mucho más interesante por una serie de funciones que implementa nuevas.
Si alguna vez has usado un control de crucero adaptativo, aunque resultan muy cómodos para realizar viajes de larga distancia, en ocasiones, como contrapartida, también suelen resultar algo incómodos cuando se dan situaciones como un coche del carril contiguo que nos adelanta y obliga a nuestro vehículo a reducir toscamente la velocidad de crucero que llevamos a fin de evitar una colisión por alcance y adecuarse a la nueva distancia de seguridad.
Desde Honda quieren poner solución a eso, anticipándose mediante IA (inteligencia artificial) a los movimientos de otros conductores y de esta forma, suavizar mucho las actuaciones del sistema de control de crucero cuando se den este tipo de situaciones. Esto es posible gracias al uso de una cámara y un radar que le permite percibir mucho mejor su entorno.
Con el nuevo i-ACC que comenzará a introducirse en el nuevo CR-V 2015, el sistema tendrá en cuenta además del vehículo que nos precede, sino las posibles maniobras que vayan a realizar los vehículos colindantes al nuestro, estando pendiente tanto del carril de circulación de la derecha como de la izquierda y calculando la probabilidad de que uno de esos vehículos pueda introducirse en nuestro carril, anticipándose cinco segundos a su maniobra accionando los frenos de forma progresiva, siendo mucho más suave en su ejecución que el tradicional control de crucero.
