Con este anuncio oficial, Porsche confirma el ulterior debut del esperadísimo Porsche Cayenne de tercera generación. La marca de Stuttgart pondrá de esta manera punto y final a un desarrollo que se ha alargado durante varios años y que ha sido motivo por el cual la segunda generación del Cayenne se ha alargado en tiempo hasta ocupar un total de siete años en el mercado.
El nuevo Porsche Cayenne marcará un antes y un después en la historia contemporánea que el SUV alemán lleva escribiendo desde principios de siglo. A diferencia de los modelos que reemplazará, el nuevo Cayenne hará un guiño al dinamismo y a las prestaciones, con unas dimensiones algo más compactas y un empaque dirigido a un público rejuvenecido y reorientado. Tomando como punto de partida la plataforma MLB Evo, compartirá chasis con el Lamborghini Urus, Audi Q7 y Bentley Bentayga. ¿En otras palabras? De por sí, el nuevo Cayenne será más ligero, mucho más contundente, y mejorará en todos los sentidos.
Un dato a tener muy en cuenta y que se sitúa como vital, es la confirmación por parte de Porsche respecto a una versión híbrida que, a diferencia de lo visto hasta ahora, se comercializará como tope de gama por encima del tradicional Cayenne Turbo S. Bautizado como Porsche Cayenne Turbo S E-Hybrid, estamos ante un futuro SUV híbrido que mimetizará el mismo kit híbrido que el nuevo Panamera, desarrollando de esta manera unas cifras brutales: 680 caballos y 850 nm de par.
Más allá del E-Hybrid, Porsche ofrecerá el nuevo Cayenne con una gama de motorizaciones gasolina y diésel mayormente de 6 cilindros, aunque también habrá versiones «puras» sin sistema híbrido de 8 cilindros. Será el próximo 29 de agosto cuando Porsche tire de la manta, y lo presente en Stuttgart previa presentación en el Salón del Automóvil de Fráncfort.
