Nos acercamos a la culminación del año 2016, y como es tradición, muchas compañías aprovechan para revisar sus precios con motivo de la entrada al nuevo año. En el caso de Barcelona, ha presentado aprovechando la coyuntura una medida que a nuestro criterio, nos parece bastante acertada, ya que por una parte respeta la voluntad del conductor, pero por otra, te invitan a dejar de usar el coche con una compensación que bien agradecerán muchos.
Para ello, a aquellos propietarios de los vehículos más contaminantes, El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha anunciado que les ofrecerá viajar durante tres años de manera gratuita en transporte público con una condición: tendrán que achatarrar su viejo y contaminante coche. Pero… ¿cuáles son los criterios para considerar un coche ‘viejo y contaminante’? de acuerdo al plan inicial, todos aquellos diésel fabricados antes de 2006 o los gasolina que cuentan con más de 20 años a sus espaldas.
Aquellos conductores que opten por esta iniciativa, recibirán una tarjeta verde (título de transporte nuevo), después de haberse comprometido previamente también a no comprar un coche nuevo. Evidentemente, y para que no haya picaresca, esta tarjeta irá asociada a un DNI concreto.
Cabe destacar que previamente, Barcelona ya anunció protocolos anticontaminación que incluían restricciones al tráfico similares a las que planea ejecutar Madrid -y que van en línea de otras que se están realizando en diversas partes del mundo con una alta densidad de tráfico rodado-.
En cualquier caso, aún nos quedan algunas dudas en el tintero que esperemos que nos aclaren a lo largo de las próximas semanas. ¿Afectará también a coches eléctricos? es decir, ¿el compromiso es únicamente para no comprar coches de combustión interna? y por otra parte… ¿se podrán emplear todos los transportes públicos de la ciudad o encontraremos restricciones de alguna índole?
