Hace unos días pudimos conocer en todo su esplendor el nuevo Audi Q8, el SUV que se sitúa en al cúspide de la gama del fabricante y del que pudimos conocer todos sus detalles.
Esta gama inicial aterrizaba con tan sólo dos motores, un gasolina de 340 CV (55 TFSI) y un diésel de 286 CV (50 TDI), en ambos casos con caja de cambios automática. Evidentemente, la marca de Ingolstadt tiene grandes planes a nivel mecánico, y por ello, la gama de motores no finalizará ahí… ahora bien, ¿cuál será el más potente de todos ellos?
Uno que sea capaz de poder hacer frente al Mercedes-AMG GLE 63 S y a su vez, también al BMW X5 M. Es de esperar, por tanto, que nos encontremos el mismo V8 biturbo de 4 litros del Lamborghini Urus que en este caso contaría con una potencia que oscilaría los 600-650 CV.
Algunas informaciones recientes apuntaban incluso a que este mes o el siguiente podríamos conocerlo, pero de momento todavía no hay nada seguro, más allá de que los ingenieros de la firma se encuentran poniendo a prueba los prototipos en Nürburgring para conseguir que sus más de dos toneladas sean capaces de moverse con agilidad a gran velocidad por las curvas que componen el trazado.
X-Tomi Design se ha puesto manos a la obra para ilustrarlo y el resultado lo puedes ver en el render que arriba aparece. Paragolpes heredado del RS4 Avant, unas pinzas de freno de grandes dimensiones en el eje delantero, pasos de rueda sobredimensionados o el logotipo quattro en la parte inferior del paragolpes. Y aunque su zaga no se puede ver, cabría esperar un paragolpes específico con un difusor muy llamativo en el que vayan acopladas cuatro salidas de escape de las que emanen la sinfonía de los ocho cilindros.
