Aunque ya pudimos verlo en el CES de Las Vegas, en el Salón de Ginebra de 2016 volverá a hacer aparición el Rinspeed Etos Concept, un modelo basado en el BMW i8 pero que introduce una amplia lista de modificaciones sobre dicha base que lo hacen mucho más interesante y aún más diferente si cabe al resto de deportivos que acostumbramos en el mercado.
Primero entremos a su interior porque es donde podemos encontrar los cambios más techies y curiosos. Empezando por sus dos pantallas de 21 pulgadas de alta resolución desde las cuales podemos controlar numerosos parámetros y visualizar un amplio abanico de información. Hasta ahí nada que no solamos ver en los prototipos de los fabricantes.
Lo verdaderamente rompedor viene de la mano de una columna de dirección retráctil cuya fabricación corre a cargo de ZF TRW y que se retrae cuando el coche entra en conducción autónoma, porque sí, el prototipo cuenta con dicha peculiaridad. De esta forma, el conductor tiene mucho más espacio en su zona para poder ejercitar una mayor libertad de movimientos.
Y precisamente para mejorar al máximo posible su comunicación con el exterior de cara a hacer más eficaz su autonomía en la conducción, cuenta con un total de ocho cámaras en HD proporcionando una visión de 180º de la zaga y el frontal empleando además la tecnología de comunciación E-horizon con el que recibe constantemente información sobre alertas o avisos de situaciones peligrosas en la vía, pero además, sincroniza con las señales de tráfico para lograr toparse con los menos semáforos rojos posibles.
Pero ahí no acaban los gadgets del prototipo: cuenta también con un drone con cámara que nos permitirá obtener una visión más periférica del coche y del entorno y que además, curiosamente, cuenta con su propio helipuerto en la zaga.
Estéticamente, los cambios más llamativos son las llantas de 20 pulgadas Borbet GTX, además de otros cambios en su kit de carrocería y cómo no, el color de carrocería que pasa de todo menos desapercibido.
Rinspeed Etos Concept
