Esta vez sin accidentes en la nieve, el Mercedes Clase S Coupé AMG está recibiendo un gran número de cambios, y es que como se puede apreciar en este prototipo el camuflaje nos señala las zonas más afectadas.
Los cambios más importantes son, entre otros, unas ópticas delanteras rediseñadas con tecnología LED, paragolpes renovados y una parrilla frontal nueva, muy similar a la que estrenó reciéntemente el SLS AMG Gullwing.
Al igual que en el Clase S estándar, habrá dos variantes AMG. Por una parte la versión básica V8 de 6.2 litros y 525 caballos, y por otra el todopoderoso V12 biturbo, de 612 caballos. Sin saber a ciencia cierta cuál es el que están probando en estas pruebas de invierno, nos queda claro que ambos se consolidarán como uno de los coupés grandes más potentes y rápidos del mercado.
Vía: World Car Fans