El BMW Serie 1 actual recibió una ligera actualización a mediados del pasado mes de año y con unos ligeros retoques y pequeñas mejoras, BMW pisó el acelerador a fondo para llegar cuanto antes al que será el Serie 1 de tercera generación. Para esta ocasión, la marca alemana de Múnich prevé cambios muy importantes que más allá de todo lo que te hemos contado en MotorAdictos durante estos últimos años, parece que irán aún más lejos de lo previsto inicialmente.
Con el nuevo Serie 1, BMW apunta alto a un mercado que ha evolucionado muchísimo desde que el primer Serie 1 llegase al mercado a mediados del pasado año 2004. Más de trece años han pasado desde que el hatchback alemán hiciese una primera aparición y cautivase al mercado europeo con un éxito arrollador que durante estos últimos tiempos, se ha frenado un poco. ¿La causa? Ni más ni menos que el auge de otros proyectos como los crossovers compactos o los b-SUVs. Y en el caso del Serie 1, BMW no quiere que pierda el tren. Por ello, los parecidos con el BMW X2 serán más que razonables.
Como ya te contamos, la principal novedad del compacto bávaro será el uso de la plataforma modular UKL que ya está presente en otros modelos de la marca y que ofrece tracción delantera como estándar y tracción total como opción. También presente en el X2, el Serie 1 adoptará este chasis para permitir un precio inferior, mejor maniobra, y en general una adaptación más que necesaria al público mayoritario al que está enfocado. En términos de diseño, se asemejará al X2 pero sin dejar atrás el estilo compacto urbano. ¿En otras palabras? Será muy similar al X2 pero sin ápice de crossover, un hatchback puramente urbano.
Previsto para estar en el mercado antes de que termine la década, el BMW Serie 1 será vital para el fabricante alemán. Más allá de un cambio de diseño o de la adaptación de la plataforma modular UKL de tracción delantera, el Serie 1 se adentrará en un nuevo mercado y como tal, arrastrando al próximo Serie 2 Coupé, incluyendo el mismo tipo de plataforma.
