BMW anunció recientemente sus intenciones para ampliar la gama de modelos CS, a raíz del debut del M4 CS y con vistas a que prácticamente toda la gama M Performance cuente, al menos, con una versión de estas características. Como no podía ser menos, el actual baby M por excelencia, el BMW M2 Coupé, será el primero en recibir esta expansión de la gama Clubsport, y ojo, porque lo que está por venir es mucho más impactante de lo que pudiésemos pensar a simple vista.
El BMW M2 CS está de pruebas durante esta semana en el viejo Nürbürgring, este prototipo de pruebas rueda en alta intensidad y BMW sigue exprimiendo los límites del coupé y buscando sus límites, todo ello con un camuflaje notable pero que a su vez, nos da a entender dónde estarán realmente las mejoras y cambios a destacar. El frontal y la parte trasera, serán las partes más afectadas… pero solo a simple vista.
BMW dotará al M2 CS de un nuevo kit aerodinámico que incluirá nuevos diseños tanto para el frontal como para la parte trasera, junto con un nuevo alerón trasero fijo, llantas más grandes, y cambios en la suspensión y en el sistema de frenado, acercándolo más al uso en trackdays. Estos cambios serán obligatorios ya que el motor del M2 CS será el mismo N55 que portan los actuales M3 y M4, es decir, el 3.0 litros Twin Turbo de 6 cilindros que recibirá una pequeña reducción de potencia hasta alcanzar los 400 caballos, frente a los 425 del M4. El «bump» respecto al M2 estándar será importante, y junto con las del chasis y la reducción de peso, los tiempos en circuito y las prestaciones sobre asfalto darán un giro radical.
