Cuando Mercedes-Benz presentó el A 45 como tal hace ya varios años, desde un primer momento quedó claro que la marca alemana iba a por todas en cuanto al mercado de los compactos deportivos. Estableció un nuevo estándar, y dejó bien claro que en la marca alemana no querían competir con los compactos tradicionales de siempre, para nada… querían ir a lo más alto, y desde luego que lo acabaron consiguiendo. Sin embargo, no todo acabó por ser tan beneficioso.
Precisamente por el hecho de que el AMG A 45 actual esté en 381 caballos -se prevé que el A 45 de segunda generación vuele hasta los 400 cv- se hace más necesario que nunca un hueco entre éste y el A 250 Sport, de 218 caballos. La incapacidad para competir con compactos deportivos de un alto volumen de ventas, como el Volkswagen Golf R, hacen que al compacto alemán de la estrella se le escapen un importante volumen de ventas. Por esto mismo, Mercedes-Benz lo hace oficial: el Mercedes AMG A 32 llegará al mercado, y suplirá exactamente lo que hemos comentado.
No solo será el AMG A 32, sino que también lo veremos en el resto de variantes que portan la plataforma modular MFA de la marca alemana. Esto quiere decir que también estará presente en los CLA y GLA, y ojo, también en el Clase A Sedán que veremos en el mercado el año que viene. Parece confirmado que bajo el capó, veremos un 2.0 litros de 4 cilindros algo descafeinado respecto al del AMG A 45, pero aún así muy potente y dinámico, aproximadamente 310 caballos.
